sábado, 10 de julio de 2010

Sobre Charly y desmayos

Día. 9 de Julio. Conmemoración de la declaración de la Independencia. San Miguel Tucumán. El día comienza tranquilo, como cualquier día en el que no hay mucho que contar, solo saludarnos y sonreír. En otros lugares de la provincia hay diferentes eventos muy lindos para verlos por la televisión.
Eran las 16 cuando mi amigo Oscar me invita a su casa. Esta noche toca Charly! Hoy cumpliría años la negra! Es obvio que tomamos algo. Con mi amigo compramos un Fernet chico todo tranquilo. Conversamos con unas chicas amigas y empezamos a pensar como llegar a la plaza Independencia, cosa bastante difícil si solo andan dos colectivos por líneas y pasan repletos. Tomamos un remis o taxi dependiendo quien lea esto. Llegamos a la casa de un compañero. Este nos corrió porque estaba con su novia y quería privacidad. Vagando por la ciudad caminamos unas veinte cuadras y llegamos a la plaza. Pocos baños en el camino así que íbamos bailando hasta llegar a la radio donde trabaja mi amigo.
La plaza Independencia estaba repleta. Me encontré con más compañeros. Seba y Mario. Luego de dar vueltas por la plaza mientras cantaba Teresa Parodi. A mis compañeros mucho no les agrada la cantante a mi si, comenzamos el arte de empujar gente y que esta no se enoje. En este arte me destaco en creces así que yo era el que abría camino a mis compañeros.
Llegamos casi al frente del escenario. Se veía muy bien desde nuestra posición. Faltaban 20 minutos para que Charly tocara. Una chica en el camino se prendió de mi y no me soltó en todo el camino y cuando estábamos en el lugar nos agradeció pero lo mismo seguía agarrada a mi y a mi mochila. La gente se golpeaba mucho. Yo porque no tenía otra cosa que hacer la protegía y miraba el escenario.
Cuando estaba apunto de tocar Charly, mi amigo Mario se comienza a sentir mal. En el primer acorde de Charly se desmaya. Estaba muy pesado mi compañero. En la mañana había estado levantando ripio así que mis brazos estaban muertos. Hice el esfuerzo sobrehumano para cargarlo. Ya me desmayaba con Mario. Cuando le vi la cara pálida y cerrado sus ojos comencé a gritar y a patear gente para pasar. Un chico de la facultad, con el que nunca hablamos nos ayudó un montón. En tres cuartos de camino mis brazos dijeron basta y él me sustituyó, yo seguía dando patadas para pasar hasta que llegamos a un lugar despejado. Mario se recuperó en ese lugar. Después de 15 minutos ya estábamos bien todos. Agradecimos al chico que nos ayudó y vimos el recital de Charly.
Tocó muchas canciones. El sonido era el mejor. Estábamos lejos del escenario pero veíamos bien. Nos conformamos con una pantalla gigante. Al lado nuestro se desmayaron otras tres personas, unas por falta de aire y otras porque el alcohol ya era demasiado. Alrededor de ocho personas desmayadas cerca nuestro y no es que olíamos mal je.
Cuando terminó el recital, tiraron muchos cohetes. Los fuegos artificiales eran muy hermosos, coloridos y ruidosos. Todos quedamos maravillados. Y también preguntándonos cuanto habrán gastado en el show.
Alegres por el recital, caminamos hasta la radio con lo que nos quedaba de piernas.
Vamos a bailar! Decidimos ir a bailar. A Duende. Un Pub de Tucumán. Hace mucho tiempo que no bailaba, así que la pase bailando. No hice el intento de sacar a bailar a alguna chica porque no tenía ganas de ser “tachado” así que baile en la ronda con mis compañeros. Oscar ya estaba bastante molesto. Quiso sacar a bailar a un grupo de chicas. Estas se asustaron. Yo no paraba de reírme. Había una de ella que se acercó a él y le dijo de frente que nadie quería bailar con él. Yo me seguía riendo pero mas fuerte cada vez. Esa chica era muy linda y parecía tener un carácter fuerte, eso me llamó mucho la atención, pero en los boliches yo no puedo ganar nada, porque en ellos lo que importa es la primera impresión y yo como verán no tengo una buena primera impresión.
Llegué a mi casa rendido. Cantando “tantas veces me mataron…tantas veces me morí…”

No hay comentarios:

Publicar un comentario